Como hemos visto, el cumplimiento normativo se extiende por, prácticamente, todas las áreas de la organización y, claro, por todas las disciplinas; razón por la cual, es momento de profundizar en otra de sus ramas: el compliance penal.
Veamos de qué se trata, para así conocer sus objetivos y ventajas.
¿Qué es el compliance penal?
Considerando que, como su nombre lo indica, se trata de la unión del cumplimiento normativo y el derecho penal, podemos definir al compliance penal como:
“El conjunto de herramientas que tiene como objetivo prevenir la infracción de normas de carácter penal con el fin de evitar posibles sanciones que generen responsabilidad a la empresa.”
Infracciones que podrían ser: blanqueo de capitales, estafa, insolvencia punible, cohecho, apropiación indebida, tráfico de influencias, delitos urbanísticos y delitos contra la seguridad social, hacienda pública, propiedad industrial, propiedad intelectual y medio ambiente, entre otros.
Aludiendo así, a la potestad punitiva del Estado para sancionar hechos que afecten al orden normativo no sólo de la organización, sino también de la sociedad.
¿Cuáles son los objetivos y ventajas del compliance penal?
Ahora bien, ya que sabemos a qué se aboca el compliance penal, veamos cuáles son sus objetivos y ventajas, mismas que podemos englobar en 3 grandes apartados:
1: Contar con un sistema completo de prevención y control
El cual, a su vez, deberá de contemplar 5 etapas:
- Identificación de actividades con mayor probabilidad de albergar hechos ilícitos.
- Establecimiento de protocolos que indiquen cuál es el proceso de formación de voluntad de una persona jurídica y de cómo se adoptarán y ejecutarán las decisiones en la misma.
- Disposición de modelos que gestionen los recursos financieros de forma adecuada para evitar la comisión de delitos.
- Instauración de la obligación de informar al organismo que se encargue de vigilar este sistema, acerca de posibles riesgos o incumplimientos, así como los canales para hacerlo.
- Establecimiento de un sistema disciplinario que castigue cada vez que se incumpla con el modelo de prevención, lo anterior con base en Normas Internacionales, tales como la ISO 19600 sobre gestión de sistemas de Compliance, UNE 19601 sobre Compliance Penal, ISO 37301, la reciente norma de Sistemas de Gestión de Compliance, ISO 37001 sobre prevención del soborno y la corrupción.
Y, por supuesto, la verificación periódica de este sistema, a fin de adaptarse a los posibles cambios producidos en la organización.
2: Evitar posibles sanciones
Por otro lado, otra de las grandes ventajas y objetivos del compliance penal, será evitarnos las sanciones a las cuales las personas jurídicas se pueden hacer acreedoras, incluyendo:
- Multas.
- Disolución de la persona jurídica.
- Suspensión de las actividades.
- Clausura de locales y establecimientos.
- Prohibición de realizar, en el futuro, actividades en cuyo ejercicio se haya cometido, favorecido o encubierto un delito.
- Inhabilitación para obtener subvenciones y ayudas públicas.
- Intervenciones judiciales para salvaguardar los derechos de los colaboradores o acreedores.
Siendo así, un tipo de aval para terceros, pues demuestra que la empresa cumple tanto con la legalidad como con las buenas prácticas del sector.
El compliance penal en tu empresa
Como vimos, el compliance penal va mucho más allá de sólo la prevención de delitos, pues además, la organización ganará una mejora en su funcionamiento y, claro, en su autocontrol, logrando, a su vez, una mayor y mejor visibilidad al exterior.
Así que, si quieres tomar mejores decisiones de negocio con una reducción al máximo de los riesgos (legales o reputacionales).
